En el campo de las TIC para el Desarrollo existe un consenso generalizado de que la tecnología debería ser vista como un medio para alcanzar un fin y no como un fin en si misma. Pero, a pesar de esto, los profesionales del desarrollo siempre deben hacer frente a un elemento conflictivo muy arraigado, que resulta de tratar de consensuar por un lado, la necesidad que tienen aquellos que financian los proyectos de tener un “plan” capaz de predecir los resultados y los beneficios que aportará una nueva tecnología y, por el otro, la certeza cada vez mayor de quienes trabajan junto a las bases de que tales predicciones a menudo demuestran en la práctica no tener fundamento alguno y que los “planes” a menudo tienden a cambiar. Se llevó a cabo entonces un taller de dos días de duración, con la intención de explorar las implicancias que este conflicto tiene para todos los que participan en el campo del desarrollo – en especial los encargados de formular políticas para el desarrollo, las comisiones de investigación y quienes las financian, los investigadores, los usuarios de investigación – y también con el fin de trazar el camino a seguir.